La infancia y la adolescencia son etapas de la vida asociadas a una intensa
actividad física pues los niños, las niñas y los jóvenes están en constante
movimiento, lo que en muchos casos ocasiona accidentes. Los riesgos aumentan
durante los tiempos de esparcimiento en parques, la práctica de deportes sin
precaución y descuidos en casa.
“Aunque los accidentes pueden
ser minimizados por medio de la cultura de la prevención en las familias, es
importante que padres, cuidadores o familiares sepan cómo reaccionar cuando se
presenta una situación de este tipo” afirma la doctora Martha Beltrán, pediatra
y Jefe de Urgencias de Clínica La Colina.
Si la prevención no es
suficiente y ocurre un accidente, se debe actuar con celeridad pero sin pánico,
para que las
heridas o las fracturas puedan ser tratadas de manera adecuada y evitar que se
agraven. Por esto, en época de vacaciones, se recomienda que los padres de
familia
sepan cuáles deben ser los primeros pasos, si sus hijos tienen caídas o
accidentes.
Tratar
heridas leves
1)
Si
hay heridas abiertas, lo primero que hay que hacer es presión y evitar la
salida de sangre.
2)
Lavar
con agua y cubrir con una gasa o con una tela limpia. Evitar cualquier clase de
medicamento o sustancia que pueda infectar la herida (carne, café, telarañas o
vaselinas mentoladas).
3)
Acudir
a urgencias si la herida estuvo en contacto con agentes externos (mascotas,
arena, tierra, sitios públicos, entre otros), para que el médico determine si
se requieren puntos para el tratamiento de la lesión.
Tratar
traumas en la cabeza
Los golpes en la cabeza son
uno de los traumatismos más comunes entre los niños, por lo que se debe tener
en cuenta lo siguiente:
1)
Si
en la caída el niño perdió el conocimiento, debe acudir inmediatamente a urgencias.
2)
Si
el niño estuvo consiente todo el tiempo, lo aconsejado es vigilarlo durante 24
horas: su comportamiento debe ser normal, mantener su rutina de comidas y
sueño.
3)
En
caso de que se queje de dolor, haya comportamientos extraños o vómito, acudir
al servicio médico lo más pronto posible.
Tratar
heridas graves o quemaduras
1)
Lavar
la herida con abundante agua fría. Retirar todos los elementos que puedan
mantener el calor. Evitar emplear cualquier otro tipo de sustancia (café, crema
de dientes, crema de manos…).
2)
Tapar
la herida con una tela limpia y mojada.
3)
Acudir
de manera inmediata a un servicio de urgencias para recibir atención adecuada
de la herida.
Inmovilizar
en caso de fractura
1)
Siempre
tener en cuenta cómo sucedió la caída, en qué posición cayó el niño y las
características del trauma. Desde ese momento, suspender los alimentos hasta
que sea tratado por el médico.
2)
No
mover las partes fracturadas, el ajuste lo realizará el personal médico en la
clínica. Mientras tanto inmovilizar las dos articulaciones próximas a la lesión
con cartón o con tela.
3)
Acudir
a la clínica en donde habrá especialistas, toma de imágenes diagnósticas y
facilidades quirúrgicas en caso de ser necesario.
Los
cuidados de un niño con yeso
1)
Mantener
el yeso limpio y seco en todo momento. Protegerlo con papel de cocina transparente.
2)
Estar
atentos a la movilidad y la apariencia de los dedos (deben mantener su color
rojizo).
3)
Al
finalizar el periodo con yeso, se debe asistir a las terapias indicadas por el
especialista.
(La redacción de este comunicado de prensa
contó con la asesoría médica de la Dra. Martha Beltrán, pediatra y Jefe de
Urgencias, y el Dr. Diego Ortiz, Ortopedista pediatra de Clínica La Colina).