Por: Prensa Cerescos (Marcela Aguilar)
Vestida de blanco y negro, de luz y luto, Alejandra Borrero se para en el centro del escenario del Teatro Arlequín, en Casa E. Ella, como buena actriz, afirma que Todos actuamos en la vida. Pero esta no es una obra más. Es su voz como puesta en escena para denunciar una verdad desmenuzada en cifras. De acuerdo a los datos de Borrero, en Colombia: 9 de cada 10 víctimas de violencia conyugal son mujeres. En 8 de cada 10 casos de violencia infantil, la víctima es una niña. Cada 3 días, una mujer es asesinada por su pareja o ex pareja. Cada día hay 14 niñas víctimas de violencia infantil.
Por su parte, en Bogotá, la violencia física en pareja aumentó en un 5%, respecto a 2017. Durante este 2018, 805 mujeres han sido víctimas de violencia sexual en la capital del país.
¿Cómo hacer frente a esta violencia, que se cuela en cada localidad, en cada pueblo, y que arremete contra la mujer, muchas veces en el seno de sus propios hogares?
Bajo la mirada de estas preguntas, Casa E, MASGLO y el Programa de Alianzas para la Reconciliación de USAID y ACDI/VOCA crearon la Red de Mujeres M: una estrategia que tiene el propósito de capacitar a 120 mujeres manicuristas de cuatro ciudades del país, con el fin de estructurar una red de agentes de cambio y transformación social contra la violencia de género.
‘Este proyecto enaltece el rol de la manicurista y trabaja para desarrollar el potencial que tienen las mujeres que ejercen este papel para contribuir a la erradicación de violencia de género’, afirmó Patricia Hunter, directora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, USAID, quien agregó que a las mujeres que participen en este proyecto “Se les va a capacitar para que puedan ser multiplicadoras que divulguen información contra la violencia de género, y a la vez, se les va a generar empleo”.
Con su participación en el proyecto, el Programa de Alianzas para la Reconciliación de USAID y ACDI/VOCA tiene el objetivo de combatir la violencia de género y violencia intrafamiliar en los territorios, capacitando a las mujeres sobre su valor, fuerza y poder como el grupo social más influyente.
La manicure como acto de rebeldía contra la violencia
Teniendo en cuenta que en Colombia hay más de 500.000 manicuristas de las cuales el 60% utiliza MASGLO, la compañía colombiana de esmaltes decidió liderar esta iniciativa, en sinergia con Casa E y el Programa de Alianzas para la Reconciliación de USAID y ACDI/VOCA.
‘Hace dos años, en compañía de nuestros aliados Casa E y el Programa de Alianzas para la Reconciliación PAR de USAID y ACDI/VOCA, empezamos a conceptualizar un proyecto de transformación social que diera un paso más allá de lo que habíamos hecho previamente. Nuestro propósito con este Proyecto es capitalizar el profundo cariño y admiración que millones de mujeres sienten por MASGLO, no solo para trasmitir un mensaje de empoderamiento y de rechazo contra la violencia de género, sino además, para contribuir en la solución del problema, proporcionando herramientas para que las mujeres detecten oportunamente situaciones de riesgo y se empoderen’, afirmó Nelson Cabrera, gerente de MASGLO.
Cabrera añadió que ‘Las mujeres que pertenecen a la comunidad manicurista son nuestras voceras naturales en toda Colombia. Por eso, estamos orgullosos de trabajar con instituciones de tanto valor, preocupadas por generar alternativas para mujeres que han sido víctimas de violencia’.
Con su participación, MASGLO busca ser un portavoz que invita a las manicuristas a prevenir la violencia contra las mujeres, advirtiendo a sus usuarias sobre posibles inicios de maltrato psicológico y físico, y sobre cómo prevenirlos o cómo tratarlos.
Casa E contra la violencia de género
Para Alejandra Borrero “Ese espacio íntimo de la manicurista es una oportunidad maravillosa para poder hablar de temas como la violencia de género. Muchas mujeres van y se desahogan con una manicurista, que te va a oír, pero a sabiendas de que la conversación no va a trascender a ningún lugar. Queremos aprovechar esta situación para que las participantes de la Red de Mujeres M se empoderen y les cuenten a otras mujeres sobre sus derechos y las rutas de atención que tienen en caso de ser víctimas de algún tipo de violencia. Es una red clandestina y queremos que sea clandestina”.
Según Borrero, la capacitación de la red, que ya tuvo inicio, comenzó con un espacio para concientizar a dichas manicuristas de la violencia de la que ellas mismas han sido víctimas. “Todas las mujeres de Colombia hemos sufrido de una u otra manera violencia. Ellas primero tienen que tomas consciencia de sus propias historias”, afirmó la actriz.
Los componentes de la Red de Mujeres M
Las manicuristas que liderarán la red de mujeres serán capacitadas y dotadas de información, conocimiento y herramientas de apoyo en los temas de derecho de las mujeres. Asimismo, serán articuladas con las entidades que hacen parte de las rutas institucionales de atención a las violencias. Todo esto para que puedan asesorar a sus clientas y comunidad, sobre cómo actuar frente a este tipo de situaciones.
El pasado 19 de septiembre, la Red de Mujeres M participó en el taller Rompiendo imaginarios de violencia a cargo de la artista y activista Alejandra Borrero, en las instalaciones de Casa E, como punto de partida del proyecto. Este es un espacio de inspiración, reflexión y empoderamiento donde Alejandra Borrero habla sobre los mitos y creencias culturales que persisten en nuestra sociedad y se adaptan como hechos cotidianos que perpetúan la violencia contra la mujer.